Repartidores en la mira del delito: golpean a un joven y le quitan la bici
Edición Impresa | 23 de Abril de 2025 | 02:18

El reloj marcaba las 22.50 del pasado lunes cuando un joven repartidor de una aplicación móvil vivió una verdadera pesadilla en las calles de La Plata. Mientras intentaba cumplir con su jornada laboral, fue sorprendido violentamente por dos delincuentes armados que, tras amenazarlo de muerte y golpearlo en el rostro, le robaron su herramienta de trabajo: una bicicleta rodado 29.
El hecho ocurrió en la intersección de las calles 4 y 34. El trabajador circulaba por calle 34 con sentido hacia 35, rumbo a entregar un pedido. En ese momento, fue interceptado por dos hombres a bordo de una moto negra tipo 110, visiblemente deteriorada y sin los plásticos colocados. El acompañante descendió del vehículo, desenfundó un arma de fuego y lo amenazó: le exigió sus pertenencias y, pese a que el joven accedió sin resistencia, recibió un golpe en el ojo izquierdo que lo dejó con un hematoma severo.
Los asaltantes se dieron a la fuga con la bicicleta por calle 34, en dirección a calle 3, y hasta el momento permanecen prófugos.
Las primeras hipótesis apuntan a que se trató de un robo al voleo. Un ataque aleatorio, que esta vez tuvo como víctima a un joven que solo intentaba cumplir con su turno nocturno.
Este nuevo episodio de violencia en la ciudad vuelve a poner en foco la inseguridad que enfrentan a diario los repartidores, trabajadores esenciales que muchas veces arriesgan su integridad en cada trayecto.
Tal como vienen informando este diario, trabajar como delivery en la Ciudad se ha convertido en una labor de alto riesgo, especialmente por el aumento de robos violentos y accidentes viales que afectan principalmente a motociclistas.
Tras la pandemia, creció notablemente la cantidad de repartidores, muchos de los cuales dependen de esta actividad como su principal fuente de ingreso. Sin embargo, enfrentan amenazas constantes, sobre todo durante la noche.
Una nueva preocupación son los “falsos repartidores” que, usando mochilas de aplicaciones, cometen delitos como el robo de motos, celulares y pertenencias, generando una peligrosa confusión e inseguridad. A pesar de reclamos públicos, como la manifestación en Plaza Moreno en febrero, la situación no muestra mejoras concretas
La investigación sobre este reciente episodio continúa y no se descarta que este hecho guarde relación con otros ataques similares registrados en las últimas semanas.
Mientras tanto, la víctima, aún conmovida por el violento episodio, se recupera de la agresión y del susto. Solo espera justicia.
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