El Papa, con una cama electrónica en el Vaticano

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Tras su salida del hospital Gemelli en Roma después de una internación de 38 días a causa de una neumonía, el papa Francisco ya está instalado nuevamente en la Casa Santa Marta, un pequeño edificio del Vaticano que ha sido su hogar desde su elección como pontífice en 2013.

Construido en 1996 como lugar para alojar a los cardenales durante un cónclave papal para elegir un nuevo pontífice, Santa Marta está estructurado como un hotel, con habitaciones para huéspedes distribuidas en cinco pisos, una pequeña cafetería y una capilla.

Pero las instalaciones no suelen estar abiertas al público. En los años entre cónclaves, sirven principalmente como hogar para muchos sacerdotes que trabajan en el Vaticano, quienes cuentan con pases especiales que les permiten entrar.

El Papa y sus colaboradores más cercanos ocupan varias habitaciones -varias destinadas al trabajo- en el segundo piso del edificio. En sus aposentos privados, Francisco ha vivido hasta ahora relativamente sin ayuda, atendiendo muchas de sus propias necesidades y permaneciendo en gran parte oculto a la vista del público.

Según informó el Vaticano, no se han hecho nuevos arreglos especiales en las instalaciones para cuidar a Francisco mientras pasen los dos meses que los médicos le indicaron para descansar y restablecerse totalmente. El único cambio fue instalar una nueva cama con controles electrónicos para hacerla más accesible para el Papa, quien ha usado una silla de ruedas en los últimos años.

El vicedirector del servicio de salud del Vaticano, Luigi Carbone, dijo a los periodistas el sábado que Francisco tendrá una enfermera las 24 horas y continuará recibiendo oxígeno suplementario a través de una cánula nasal, según sea necesario. Para cualquier emergencia será suficiente “el servicio de salud e higiene 24 horas” de la Santa Sede.

Dentro de los muros vaticanos, Francisco continúa las terapias farmacológicas y la fisioterapia motora y respiratoria: esta última contribuirá también a la rehabilitación necesaria para volver a hablar con normalidad y fluidez. Los médicos recomendaron que Francisco limite al máximo las visitas y reuniones.

 

papa Francisco

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